Serpiente reptando por España
Tras el éxito del musical El libro de la selva. La aventura de Mowgli os damos a conocer a Esther Santaella, una de las actrices de este. Esta lorquina, metida de lleno en el mundo del arte dramático, nos dió una lección muy importante para nosotros: la mejor opción para el futuro es aquella que te hace feliz.
¿Con qué edad empezaste?
Siempre he hecho cosas relacionadas con las artes, desde pequeñita. A los 3 años fui a ballet, luego estuve 4 años tocando el violín en el conservatorio, más tarde pasé por natación sincronizada y gimnasia rítmica hasta "encontrar mi sitio" en el ballet de Nuria Guevara y con la Compañía Teatral Rulé. A partir de ahí, ya empecé a tomarme más en serio la danza, la interpretación y el canto como algo que me gustaba más que como un hobbie.
¿Qué es lo que más te gusta de actuar?
Es difícil decir sólo una cosa, pero digamos que me quedo con poder transmitir valores y hacer reflexionar al espectador. Me gusta sentir que aporto mi granito de arena para cambiar la sociedad, porque el teatro es mucho más que mero entretenimiento.
También me apasiona sentir que crezco cada día, poder descubrir nuevos personajes y aportarles todo lo que yo soy mientras ellos me aportan a mí también muchas cosas. Veo la vida desde muchos puntos de vista, y siento que cada vez soy más empática y aprendo más sobre el mundo y el ser humano.
¿Cómo empezaste?
Cómo ya he dicho desde pequeñita no he parado, pero mi verdadero inicio en esto de manera un poco más seria lo ubico a los 14 años cuando comencé a formarme en danza en la academia de danza de Nuria Guevara y fui socia fundadora de la Compañía Teatral Juvenil Rulé. En esta he sido actriz, bailarina, cantante y directora en proyectos como las adaptaciones de "40 El Musical", "Hoy no me puedo levantar", "Mamma Mía" o "Soul's Café".
¿Qué te llevó a estudiar arte dramático?
Lo que me llevó a estudiar arte dramático fue que empecé a ver que todo lo que hacía relacionado con el teatro y la danza tenía más importancia para mí de lo que pensaba, ya no lo veía como un hobbie que disfrutaba sino como algo que podía ser perfectamente mi trabajo. Es algo vocacional, porque es muy sacrificado y o lo deseas de verdad o es muy fácil tirar la toalla. Estudiar arte dramático fue una decisión complicada porque a veces no inculcan que las artes no son un buen futuro y hacen que nos dé miedo enfrentarnos a una carrera así. Además, como es entendible, mis padres se quedaban más tranquilos si estudiaba una carrera que me diera más estabilidad. Así que en mi primer año de universidad hice periodismo, pero tarde muy poco en darme cuenta que no era lo que de verdad quería, que lo que siempre había querido era ser actriz y que debía al menos intentarlo. Así que decidí hacer las pruebas para la Escuela Superior de Arte Dramático de Murcia y entré, ya estoy en 3º de Interpretación Musical y cada día estoy más segura de que no me equivoqué en mi elección.Aún así, aunque estoy segura de que estoy en el camino correcto, soy realista y sé que en teatro nada está garantizado por eso no descarto estudiar otra carrera o grado en un futuro o trabajar en otros sectores. Es muy importante también tener los pies en la tierra para estudiar arte dramático.
¿Cómo llegaste a realizar el musical?
Me enteré del casting de "El libro de la selva. La aventura de Mowgli. El musical." de casualidad y decidí presentarme simplemente por ponerme a prueba y ver si era capaz de enfrentarme a un casting profesional, pero el resultado fue mucho mejor de lo que esperaba. Fue un golpe de suerte, estar en el lugar adecuado en el momento adecuado, y luego haberme formado lo suficiente y haber demostrado que si trabajo en algo doy mi 100% siempre. Arriesgué y gané, porque el "no" ya lo tenía.
¿Qué sentiste cuando te escogieron para él?
Me sentí muy afortunada, y aún lo sigo sintiendo, y muy asombrada porque no sabía dónde me metía exactamente y nunca habría imaginado que llegaría tan lejos. Cada día que me subo a un escenario a representar el musical me siento feliz, cada actuación es distinta y te aporta cosas nuevas y aún, casi dos años después, algo descubriendo cosas de mis personajes, es lo bonito del teatro, que está vivo y siempre tiene cosas nuevas que mostrarte y enseñarte. Además tengo la suerte de trabajar con unos compañeros extraordinarios que son grande profesionales y grandes personas, lo que ha hecho que el trabajo sea mucho más fácil y satisfactorio. Somos mucho más que compañeros de trabajo, somos una "manada".
El musical me ha dado muchas alegrías y sigue dándomelas, además de servirme como formación profesional que me está haciendo mejor cada día. Está siendo un gran oportunidad para mí.
¿Te gustaría dedicarte a otra cosa?
En principio quiero dedicarme a esto, a teatro, musicales, cine, tele, música... ¡Lo que venga! Mi pensamiento es formarme lo mejor posible, pues en este trabajo nunca estás lo suficientemente formado y siempre te queda mucho por aprender y probar suerte y esforzarme mucho. Pero no rechazo estudiar otra cosa en un futuro, por supuesto, nunca se sabe dónde te llevará la vida. Me interesaría estudiar algo relacionado con el deporte, como tafad, o retomar periodismo, o inglés. Pero nunca se sabe, estoy abierta a cambiar de opinión.
¿Cómo llevas el no pasar mucho tiempo con tu familia?
A veces es difícil, pero lo llevo bien. Paso poco tiempo con mi familia y mis amigos de siempre porque en mis "ratos libres" casi siempre estoy viajando, actuando, ensayando... Pero también he aprendido a valorar mucho más el tiempo que paso con ellos y a aprovecharlo mucho mejor. Cuando escoges una profesión como ésta sabes que no tienes horarios fijos, ni puedes saber qué será de ti de aquí a dos años, pero a mí me compensa.